«El contenido es el rey». Habrás escuchado esta frase antes antes aplicada al SEO y a las plataformas audiovisuales como Netflix, HBO o similares. Y sí, también es válida para cartelería digital. Tener una buena instalación es importante y es la base de la cartelería digital, pero será el contenido el que la hará eficiente. La cartelería digital es un medio en sí mismo, y por lo tanto tiene sus propias reglas debido a la ubicación de las pantallas (tiendas) y a que generalmente carece de sonido. Por este motivo es recomendable crear contenido específico para este medio atendiendo a su ubicación y los objetivos. Estos son algunos de los errores que hemos ido viendo a lo largo de nuestra experiencia.
No tener un objetivo definido
El primer paso antes de empezar a crear el contenido es fijar objetivos, qué queremos conseguir con nuestro circuito de cartelería digital: aumentar ventas, atraer clientes del exterior, mejorar la comunicación, agilizar procesos, etc. De hecho, el objetivo no debería fijarse antes de crear el contenido, si no antes incluso de instalar las pantallas, ya que la ubicación de estas va a influir en los resultados que podemos conseguir con ellas. Si instalamos pantallas en un escaparate nos puede servir para atraer clientes; si la instalamos en un pasillo, para aumentar la cesta media; si lo hacemos en caja, para crear un sistema de cola única, etc.
Usar contenido no adaptado al medio
Como decíamos anteriormente, la cartelería digital no suele tener sonido para que no interfiera con la música del local. Por lo tanto, todo el contenido de este medio debe ser entendible únicamente mediante la vista.
Para entender mejor vamos a ver un ejemplo de contenido no adaptado al medio ¿Poner vídeos de Youtube con subtítulos sería una opción? En la mayoría de los casos, no. Las pantallas suelen estar colocadas para que se vean a cierta distancia, a la que sería imposible leer los subtítulos. Además, obligaría a los clientes a detenerse a ver todo el vídeo, algo improbable cuando alguien está de compras.
Que el mensaje no se entienda en un golpe de vista
Seguro que algunas vez, paseando por los pasillo de un supermercado, te has encontrado con una tele en un pasillo donde tienen puesto un anuncio estilo Teletienda de algún producto. ¿Cuántas veces te has parado para ver el spot entero? Efectivamente, ninguna. Los mensajes de digital signage deben ser concisos y asimilables con un golpe de vista, ya que el cliente suele dedicarle pocos segundos a la publicidad cuando esta se encuentra en una zona de paso. Es únicamente en zonas de espera, como la cola de una caja o las zonas de turnos de un supermercado, donde el cliente va a estar detenido y podemos disponer de su atención para incluir algún tipo de contenido más largo.
Dividir la pantalla innecesariamente
Nos referimos a esas pantallas divididas en diferentes cuadros, en cada uno de los cuales aparece una información diferente. Una división muy común es poner unas franjas debajo que muestran titulares de noticias o información del tiempo. Pues bien, evita hacer divisiones de pantalla a no ser que sea necesario o venga bien para tu estrategia de contenidos.
Ten en cuenta que al dividir la pantalla estás dividiendo también la atención. Si muestras demasiada información a la vez, es probable que el espectador no pueda asimilarla toda, haciendo que tus contenidos sean menos eficientes. Si divides la pantalla procura que no haya saturación de información y que se puede entender todo al instante. Por ejemplo, evita poner un spot y titulares de noticias al mismo tiempo, ya que para poder ver uno de los contenidos hay que apartar la atención del otro de manera prolongada.
Sin embargo, la división de pantalla puede resultar útil, por ejemplo, para mostrar los turnos de un supermercado. Ahí se podrían mostrar los diferentes turnos de cada sección junto con vídeos o información de precios, ya que además coincide con que es una zona de espera y el cliente le puede dedicar más tiempo a las pantallas.