Se conoce coloquialmente como ‘Mikado’ a un ambientador que difunde el aroma mediante varillas de madera sumergidas en un recipiente con perfume. Su nombre hace referencia al juego de mesa con el mismo nombre, debido a su semejanza visual con los palillos.
Lo ideal es que las varillas del mikado estén hechas con médula de ratán. ‘Ratán’ es una denominación común para referirse a diferentes especies de palmeras. La alta porosidad de este material lo convierte en el más indicado para absorber el perfume. No obstante, también es común que se utilice bambú.
El mecanismo del mikado es muy sencillo, las varillas son las encargadas de evaporar el perfume. Al ser porosas se impregnan de fragancia, consiguiendo que el aroma persista durante más tiempo que si la dejáramos evaporar en contacto directo con el aire.
El número de varillas que utilicemos nos servirá para regular la intensidad de perfume. Cuantas más varillas sumerjamos, mayor será la intensidad del perfume, pero menor la duración. Es conveniente darle la vuelta a las varillas cada semana para optimizar su eficacia.
Ventajas de los mikados
Son eficientes en pequeños espacios
Están indicados para pequeños espacios o zonas específicas. Un mikado de calidad puede durar entre 1 y 3 meses dependiendo de la intensidad que queramos, así que para este uso resulta una opción económica.
Son decorativos
Uno de los principales motivos para elegir un mikado es su estética. Su diseño nos puede ayudar a crear ambientes elegantes o temáticos.
Son rellenables
Puedes adquirir el aroma a granel y reutilizar los mikados. Se pueden rellenar siempre y cuando se utilice el mismo perfume. Una vez que las varillas están impregnadas, no es recomendable utilizarlas con un perfume diferente, ya que se mezclarían ambos, dando lugar a un olor no deseado. En cualquier caso, si optas por cambiar de perfume, puedes seguir reutilizando el recipiente y cambiar únicamente las varillas. Es este caso también es recomendable lavar el recipiente antes de introducir el nuevo perfume para quitar completamente el olor del anterior.
No requieren electricidad
Los difusores de perfume eléctricos tienen un consumo muy reducido. No obstante, el mikado nos permite libertad para colocarlo en cualquier lugar sin necesidad de tener un enchufe cerca.
Mikados como herramienta de marketing
Si tienes un negocio y estás pensando en realizar acciones de marketing olfativo o crear merchandising, los mikados son personalizables con logo e imagen de marca, de forma que pueden convertirse en un producto comercializable o en un regalo para fidelizar clientes.
Si quieres aromatizar un establecimiento, te recomendamos el servicio de aromatización con nebulizadores profesionales. Puedes contactarnos sin compromiso para más información.
No obstante, en determinadas ocasiones puedes utilizar mikados. Te damos algunas observaciones para que las tengas en cuenta:
- Utiliza una fragancia acorde con tu imagen o tu actividad. Por ejemplo: busca aromas relajantes si dispones de una clínica; sobrios si quieres trasmitir elegancia y lujo; o estimulantes si deseas evocar una imagen juvenil. Las posibilidades son infinitas.
- Es recomendable utilizar el mismo aroma en todo el establecimiento. A no ser que ubiques los mikados en zonas con separación física, los aromas pueden mezclarse y dar lugar a olores no deseados.
- No los utilices para tapar malos olores a no ser que sea un mikado específico para esa función. La razón es la misma que en el punto anterior.
- Si los colocas cerca de la entrada conseguirás un ‘Efecto bienvenida’. El contraste con el exterior al entrar en tu establecimiento, creará una sensación agradable inmediata.
- Si los ubicas en una zona con circulación de aire, cerca de un aire acondicionado o ventilador, el aroma tendrá una mayor difusión.
- Piensa en las zonas más transitadas para ubicarlos.