El Efecto Proust le debe su nombre a Marcel Proust, escritor francés de principios de siglo XX autor de En busca del tiempo perdido. Es precisamente de esta obra de donde procede el nombre de este concepto. En la novela, el protagonista relata los recuerdos que le evoca el sabor de una magdalena mojada en té. Este rememora pasajes de su infancia en la siguientes páginas del libro inspirado por el sabor de la magdalena. Nada más probarla le vinieron a la cabeza los veranos en el pueblo de su tía, que era quien le ofrecía magdalenas los domingos por la mañana cuando él era niño y, seguidamente, va hilando imágenes de su infancia: su antiguo cuarto, la casa en la que vivía, la plaza del pueblo donde le mandaban antes de almorzar, las calles por las que solía hacer recados y, finalmente, todo el pueblo y sus alrededores.
El protagonista llega a comentar que ver la magdalena no le había recordado nada, quizás porque estaba acostumbrado a verlas en las pastelerías, y que fue al comerla cuando se desató el recuerdo. Como él mismo relata, “todo eso, pueblo y jardines, que va tomando forma y consistencia, sale de mi taza de té”.
El hecho de que fuese un sentido lo que inició todo, llevó a que se adoptase el concepto ‘Magdalena de Proust’ o ‘Efecto Proust’ para definir situaciones en las que un estímulo sensorial hace rememorar una parte del pasado que esté asociada a ese sabor, olor o sonido.
Realmente, la magdalena a la que se refería Proust no era la tradicional, sino esta variante francesa conocida como Madeleine de Commercy.
La ciencia detrás del Efecto Proust
Decir que una magdalena te transporta al pasado suena pretencioso o incluso fantástico pero, si aceptamos la metáfora, Proust estaba en lo cierto. Relató a la perfección un fenómeno que tiene una base científica: los sentidos, y especialmente los olores, desencadenan recuerdos.
Existen diferentes estudios acerca del tema. En un artículo para BBC, el doctor Loren M. Frank, del Instituto Kavli de Neurociencia Fundamental de la Universidad de California, en San Francisco, comentó que el hipocampo es la zona del cerebro que une los sentidos con los recuerdos. De forma que, cuando se vuelve a experimentar el mismo olor, sabor o sonido, se reactivan los recuerdos que el cerebro asoció a ellos en su momento.
Además, un estudio de la Universidad Northwestern Medicine en 2021, indica que el olfato tiene una conexión más fuerte con las zonas de memoria del cerebro que el resto de sentidos.
La Magdalena de Proust en marketing
Si el Efecto Proust es capaz de trasladarnos a lugares felices del pasado ¿De qué estamos hablando entonces? Efectivamente, de nostalgia. La nostalgia vende, porque en algún momento de nuestra vida todos añoramos aquel tiempo al que no podemos volver, pero al que sí podemos asomarnos a través de algún objeto, una película, videojuego o canción que nos permita observarlo. La moda de lo retro viene de la mano de Proust: las camisetas de grupos musicales y marcas de los 80, los remakes de películas, la re-edición de la Super Nintendo y la Mega Drive en formato mini, los conciertos de ‘Yo salía de fiesta en los 90’, etc. Todos tienen en común la nostalgia. Nos trasladan a un pasado idílico mediante un estímulo sensorial que puede ir desde un simple logo antiguo hasta un evento espectacular.
La nostalgia y la experiencia de compra
El Efecto Proust no tiene que estar asociado obligatoriamente al producto, también podemos implementarlo en la experiencia de compra y en la ambientación del establecimiento. Es útil para aquellos negocios que busquen jugar con lo retro. Eso sí, para hacerlo tenemos que tener muy en cuenta cuál es el perfil de nuestro cliente. La edad va a ser determinante a la hora de elegir qué elementos pueden desencadenar la nostalgia. Si tenemos claro nuestro target y cuales son los resortes que pueden provocarla, podemos ambientar el establecimiento con música, marketing olfativo e imágenes que le transporten a su juventud y le hagan conectar emocionalmente durante el proceso de compra.
El precio o la calidad del producto ya no son las únicas variables que mueven a los clientes. El marketing experiencial, o marketing sensorial, busca que el consumidor perciba el momento de compra como una experiencia memorable gracias a acciones o estímulos recibidos durante el proceso. Por eso, las marcas apuestan cada vez más por estimular los sentidos para reforzar la relación con sus consumidores. El 95% de las decisiones que toma un individuo son motivadas por el inconsciente, razón por la que el marketing experiencial se vuelve imprescindible para generar emociones inconscientes, donde el oído, la vista y el olfato coprotagonizan esos escenarios de compra.
Pero, al contrario de lo que muchos puedan pensar, las estrategias de marketing experiencial no son exclusivas de las grandes marcas. Despertar emociones que tengan mucha más fuerza que la parte racional a la hora de escoger un producto es una estrategia al alcance de cualquier pyme.
¿Qué puede conseguir tu negocio con el marketing experiencial?
Está comprobado que, con estrategias de marketing experiencial, la permanencia en el punto de venta se incrementa de forma exponencial. La música es un elemento indispensable, se ha convertido en el must have para la experiencia en el Punto De Venta y la comunicación con el cliente. De hecho, ya no concebimos estar en un establecimiento sin música, y ésta es la responsable de atraernos o alejarnos de una marca.
El 35% de los clientes permanece más tiempo en la tienda y el 14% compra más si les gusta la música.
Uncovering A Muscial Myth
Estudio de Heartbeats International
Pero su implementación no es tan fácil como parece. Hacer uso del audio marketing no es sólo poner música en tu negocio y punto; es fundamental segmentar antes de implementar. Hay que elegir la música más adecuada para tu público objetivo, teniendo en cuenta factores como el producto o servicio, el ambiente, la temporada del año y la imagen que quieres transmitir.
En este sentido, hay que intuir bien al cliente, lo cual es complicado, porque nuestros gustos musicales evolucionan a medida que cumplimos años, cambia nuestra forma de vida, etc. Además, no es lo mismo dirigirse a un público joven que a uno menos joven. Por tanto, ya adelantamos que dar con la música perfecta es complicado, por la diversidad de estilos musicales existentes y el gran abanico de gustos musicales que puede tener cada público. Por eso creemos que lo importante a la hora de diseñar el audio branding de un negocio es que esa música defina e identifique a la marca con sus valores.
Esos valores son los que el público afín a una marca comparte entre sí cuando compra un producto o un servicio, lo cual crea un vínculo estrecho target-marca. Aunque cada cliente tenga unos gustos personales distintos, esa marca les une gracias a la imagen que ésta refleja y con la que se ven identificados. Todo esto significa audio branding: crear una imagen de marca a través de la música. Como podréis comprobar, escoger una canción implica mucho más que el hecho de poner un hilo musical para amortiguar un silencio, por lo que contar con el asesoramiento profesional es clave.
Otro factor muy importante es el volumen de la música. No es sólo cuestión de poner la música más alta o más baja; influyen otros muchos elementos como la acústica del espacio, el diseño del proyecto de megafonía… El volumen en sí tiene que ser notorio sin robar el protagonismo a la marca y/o sus productos y que, además, no sea molesto para el público, porque en el momento en que la música dificulta la comunicación entre empleados y clientes, deja de ser un elemento potencial de venta y se convierte, justamente, en lo contrario.
Precisamente por ello, volvemos a apelar a los profesionales: es vital que el proyecto de megafonía esté desarrollado e instalado por profesionales cualificados. En TSLab no sólo creamos la identidad sonora de una marca, sino que también diseñamos la instalación de megafonía para que la experiencia del cliente sea óptima.
Por otra parte, el olfato es el sentido más poderoso, pero también es el más fácil de saturar. No se trata simplemente de que tu negocio huela bien. El olfato es capaz de dar mucho juego, generando sensaciones asociadas a un aroma. Como por ejemplo: un olor a coche nuevo para transmitir limpieza y modernidad a una empresa de alquiler de coches o el olor a café para estimular el apetito de los clientes. De ahí que lo más importante a definir en un aroma sea su intensidad para no saturar y molestar a nuestro target y que una iniciativa que puede ser muy notoria, evocadora y memorable se convierta en un input negativo de la marca.
El marketing experiencial debe estar orientado a la fidelización y a la prescripción.
A la hora de elegir y crear una experiencia olfativa es importante valorar y estudiar dónde colocar los aromas (en todo el establecimiento, en un área determinada…) y qué buscamos conseguir con este aroma (recuerdo y asociación, impulsar ventas…) para poder determinar qué composición aromática es la más acertada. Una vez más, se vuelve ciertamente recomendable acudir al asesoramiento profesional, máxime cuando hablamos de salud y de la necesidad de pasar unos filtros de control, como ocurre en el caso de los aromas. En este sentido, es muy importante confiar en profesionales cuyos aromas posean la certificación IFRA, la cual acredita la inocuidad de los aromas y que la implementación de las fragancias es segura.
En TSLab diseñamos y contamos con distintas soluciones de aromatización para crear una experiencia ad hoc para cada cliente, según sus necesidades. Además, nuestro equipo de perfumistas diseña el aroma para que esté en armonía con la marca, el espacio, los objetivos y los valores de la misma. Todas nuestras fragancias y nuestros aromas cuentan con la certificación IFRA que antes comentábamos.
La cartelería digital es otra herramienta potente de comunicación. Consiste en la emisión de contenidos multimedia a través de pantallas y todo tipo de soportes digitales. Esta nueva forma de publicidad in store abre un nuevo abanico de posibilidades para comunicarte con tus clientes: aumentar tu visibilidad, mostrar tus productos, informar o permitir que tus clientes interactúen contigo… Pero la clave del éxito de esta técnica está en una correcta ubicación en el establecimiento y en un buen contenido; si no, nos será muy difícil llegar a retornar la inversión.
El 70% de los clientes compraría mediante pantallas de digital signage si la tienda estuviera llena.
Estudio Anual eCommerce 2016
IAB Spain
La ambientación con digital signage también es fundamental. Con la colocación, por ejemplo, de pantallas con vídeos corporativos, imágenes con ofertas, promociones, etc. O videowalls que hagan más atractivo el espacio, las marcas pueden potenciar su imagen y sus ventas y el recorrido de los clientes por la tienda es una experiencia visual y, por tanto, una experiencia de compra positiva.
Experiencias al alcance de todos
Seguramente, la pregunta que te plantees si tienes un pequeño o mediano negocio sea: ¿es necesario contar con un elevado presupuesto para poner en marcha estas estrategias?
Nuestra respuesta es no. No se necesitan grandes presupuestos para llevar a cabo estrategias de marketing experiencial, sólo buenas ideas y una correcta implementación de las mismas. De hecho, en TSLab contamos con clientes de todos los tamaños y sectores, como Asador de Aranda, Brico Fermín, Hotel la Costa, Óptica Ulloa, Supermercados Naturasi, etc. Un amplio abanico de negocios a los cuales nos ajustamos independientemente de su tamaño.
Una vez escogida la estrategia para establecer el mejor vínculo emocional con nuestros clientes, ¿cómo medimos su impacto en la facturación? Calcular el ROI de las emociones y del mundo sensorial es complejo, puesto que intervienen diferentes factores. Pero lo que sí está medido es la repercusión de una gestión óptima del marketing experiencial.
En TSLab apostamos por que nuestros proyectos lleven a la fidelización, para que el retorno de la inversión no sólo se mida por lo que te aporta un cliente en concreto y a corto plazo, sino en que éste repita y, además, prescriba, garantizando así el medio y largo plazo.
Lo importante es saber conjugar e integrar los tres servicios (audio, vídeo, aroma) con criterio y profesionalidad y, también, saber si tu empresa los necesita todos. La clave reside en establecer bien la prioridad de qué es lo que tu negocio necesita para transmitir su imagen y dar respuestas a las necesidades de tu marca y a las expectativas de tus clientes.
Antes de aplicar música, imágenes o aromas, ponte en manos de profesionales que te asesoren. Cada sector, cada negocio necesita cosas distintas. Nada debe dejarse al azar.
El ser humano está sometido a los numerosos efectos que genera la actividad de las marcas. La mayoría de ellos son visuales, pero lo cierto es que otros sentidos como el olfato están ganando cada vez más protagonismo en el Punto De Venta. El sentido del olfato es uno de los sentidos más poderosos. A menudo considerado como un sentido secundario, en realidad, el olfato es uno de los mayores evocadores de recuerdos y sensaciones en nuestro cerebro.
Dentro de las estrategias del marketing sensorial para provocar recuerdos y emociones en el consumidor, apelar al olfato es, sin duda, una de las acciones más efectivas, creando posibles acciones de compra.
Hace tiempo ya que los profesionales del marketing dedican su atención a determinar cómo los aromas pueden llegar a influir en la decisión de compra y resulta que influyen mucho más de lo que creemos.
Martin Lindstrom, especialista neurólogo de prestigio en estudios de neuromarketing, calcula que el 75% de nuestras emociones son generadas por lo que olemos.
Escoger la fragancia que defina la marca
Muchas veces, al entrar a una tienda, nos envuelve una fragancia que nos atrapa y hace que nos sintamos tan a gusto que hasta nos cuesta salir.
De la misma manera que a ninguna marca se le ocurriría crear un logo de forma aleatoria, la misma relevancia la tiene el odotipo: ese olor que definirá a la marca y la imagen que transmitirá a través del él, es la firma olfativa de una marca capaz de emitir valores y sensaciones, así como esa fragancia en el Punto De Venta va acorde con la imagen que la marca pretende transmitir.
Que entremos a un Starbucks y nos invada el placer olfativo del café no es casualidad. Tampoco que clientes de TSLab como Nespresso o Caixa Popular huelan como huelen.
Todas estas marcas –y muchas más- invierten en crear fragancias exclusivas para sus marcas. El marketing olfativo no sólo va vinculado a productos que tienen una fragancia, sino también a posicionar una marca y todas, de todos los sectores, se suben al tren.
Por ejemplo, Centro Botín confió en TSlab para aromatizar una famosa exposición de Carsten Höller, transmitiendo el valor del arte también a través de un aroma.
Cuando decimos que todos se suben al tren, es todos. Caixa Popular invitó a sus clientes a “seguir el perfume de sus sueños”. TSLab creó su odotipo para hacer de la banca un lugar mucho más cercano. Y La prestigiosa escuela de negocios EUDE Business Schoolquiso darle un giro a su imagen con una ambientación aromática que reforzase su identidad e hiciese de la escuela un lugar cálido y agradable para todos los que trabajan y estudian allí.
El sentido del olfato en manos expertas
El olfato es el sentido más poderoso, pero también es el más fácil de saturar. No se trata simplemente de que tu negocio huela bien. El olfato es capaz de dar mucho juego, generando sensaciones asociadas a un aroma. Como por ejemplo: un olor a coche nuevo para transmitir limpieza y modernidad a una empresa de alquiler de coches o el olor a café para estimular el apetito de los clientes. De ahí que lo más importante a definir en un aroma sea su intensidad para no saturar y molestar a nuestro target y que una iniciativa que puede ser muy notoria, evocadora y memorable se convierta en un input negativo de la marca.
A la hora de elegir y crear una experiencia olfativa es importante valorar y estudiar dónde colocar los aromas (en todo el establecimiento, en un área determinada…) y qué buscamos conseguir con este aroma (recuerdo y asociación, impulsar ventas…) para poder determinar qué composición aromática es la más acertada. Una vez más, se vuelve ciertamente recomendable acudir al asesoramiento profesional, máxime cuando hablamos de salud y de la necesidad de pasar unos filtros de control, como ocurre en el caso de los aromas. En este sentido, es muy importante confiar en profesionales cuyos aromas posean la certificación IFRA, la cual acredita la inocuidad de los aromas y que la implementación de las fragancias es segura.
Por ello, la implementación de un aroma no es tan sencilla. Hay que elegir el aroma más adecuado para el público objetivo, teniendo en cuenta factores como el producto, el ambiente, la temporada del año y la imagen que se quiere transmitir, motivos por los que apelamos a la mano profesional para todo ello.
En TSLab diseñamos y contamos con distintas soluciones de aromatización para crear una experiencia ad hoc para cada cliente, según sus necesidades. Además, nuestro equipo de perfumistas diseña el aroma para que esté en armonía con la marca, el espacio, los objetivos y los valores de la misma.
El marketing olfativo se encarga de conectar los productos con las necesidades de los clientes, de facilitar y hacer más agradable el proceso de compra. Así que la próxima vez que te preguntes por qué has entrado en esa tienda o tengas unas ganas irremediables de zamparte un cruasán en plena compra en el súper, seguramente el gran “culpable” haya sido el aroma.
Llevamos años hablando de una supuesta guerra entre el retail y el comercio electrónico. Los retailers en un principio tenían miedo de desaparecer de la mano de gigantes del e-commerce como Amazon, eBay, que con su modelo de negocio acercaban al consumidor a millones de productos desde la comodidad de su hogar.
Sin embargo el panorama en los últimos años ha cambiado, los retailers se han adaptado a las nuevas tecnologías y tendencias, lo que ha vuelto a sus estrategias Onmicanales, porque si no puedes con tus enemigos ¡únete a ellos! ¿no?
Pero durante todo este proceso ha sucedido algo que no parecía en principio probable, y es que los mismos que nos convencieron de la idea disruptiva de que para comprar no hay que salir de casa, están comenzando también a apostar por estrategias Onmicanal.
Muchas de estas compañías e-commerce han comenzado a adquirir y/o a crear empresas para vender, recoger y probar sus productos en tiendas físicas.
Un ejemplo claro de esto es Amazon, quien ya lleva varios años poniéndolo en práctica en Estados Unidos, con sus tiendas Amazon Go y la adquisición de cadenas de supermercados como Whole Foods.
Esta estrategia parece estar funcionándoles bien, este año planean abrir tiendas en Europa en concreto en Alemania, que, si bien no es novedad, ya que en el pasado han utilizado tiendas pop up como la que crearon el año pasado en España para probar los productos antes del Black Friday o los Whole Foods en Londres, la fuerza con la que vienen este año nos hace pensar que algo esta pasando en el mercado.
AliExpress es otro grande que esta viendo la gran oportunidad que ofrece el conectar con sus consumidores de forma más directa, por lo que también han experimentado y el año pasado abrieron su primera tienda física permanente en España, la cual el día de su apertura consiguió duplicar el máximo de personas que esperaban recibir.
Pero ¿Por qué el cambio?
Los consumidores hoy en día son extremadamente exigentes y demandan de las empresas más que solo productos y servicios; la saturación actual de ofertas en cualquier sector les da el poder para elegir entre productos y marcas de prestaciones y precios muy similares, de forma que lo que ahora realmente demandan como valor diferencial o decisivo es la experiencia que le ofrezcan principalmente durante la compra.
Las personas ya no escogen entre comprar en tiendas físicas u online, más bien se mueven entre una y otra, ya sea investigando online y comprando en tiendas físicas o viceversa, por lo que una no puede vivir sin la otra, ambas son parte esencial de la experiencia de compra de los consumidores.
Las compras online le brindan al cliente la oportunidad de comparar precios y marcas de una forma más inmediata y cómoda, pero cuando se trata de ofrecer un valor añadido con la experiencia del cliente, las tiendas físicas llevan la delantera, ya que el consumidor prefiere el contacto directo.
En TSLab, colaboramos con cientos de marcas para enriquecer esas experiencias en el punto de venta, a través del marketing sensorial y con nuestros servicios de hilo musical, cartelería digital y marketing olfativo y más. Basándonos en nuestra larga experiencia somos fieles creyentes de que las marcas que apelan a los sentidos brindan experiencias más eficientes y memorables sobre las que no lo hacen. El marketing sensorial es una manera con la que las marcas hacen que su estrategia off line resalte entre el montón invitando al consumidor a visitar sus establecimientos, a permanecer más tiempo en ellos y a motivar decisiones de compra.
Se acerca el fin del año y las predicciones de tendencias para el próximo comienzan. Este año nuevo estará marcado por el fin de una década que fue testigo de grandes avances tecnológicos que fueron disruptivos para muchos sectores, lo que eleva las expectativas para el 2020.
Un claro ejemplo es el Big Data, que en los últimos años se convirtió en una tendencia, ya realidad más atractiva y rentable, mostrando su gran impacto en casi todos los sectores y del que se estima se generarán unos mil millones de dólares solo en ganancias para el próximo año.
Sin embargo, así como nacen nuevas tendencias y tecnologías, también hay otras que inevitablemente mueren.
Una muestra de esto es la personalización extrema de las acciones de marketing y experiencia en el punto de venta, y es que, a raíz del Big Data, las marcas saben mucho más de sus clientes, de su comportamiento, preferencias,.. de una manera más específica y concreta, lo cual ha desembocado en estrategias de marketing enfocadas al consumidor desde un punto de vista más individual. Sin embargo, los escándalos relacionados con esta tecnología y con el uso fraudulento e indebido de los datos han creado cierto recelo entre el público, sentimiento que creo desconfianza hacia las marcas e impacto desfavorablemente a las estrategias.
Una vez superado este recelo con las nuevas normativas y leyes aprobadas, conocer al consumidor seguirá siendo importante en el 2020, para ello hay diferentes soluciones que sin invadir la privacidad del consumidor nos permiten conocerlo lo suficiente como para cambiar la forma de implementar las estrategias y los mensajes que las marcas transmiten a sus consumidores.
¿Qué pasará con el Retail?
En el Retail, ya las estrategias tradicionales están de capa caída y el próximo año se notará más. El mercado exige a las empresas crear experiencias únicas, cautivadoras, que apelen a los sentidos y a las partes del cerebro más primitivas, que transmitan emociones que generen reacciones en el consumidor, que puedan luego ser analizadas para medir su impacto y ROI.
Este enfoque nace del gran avance que han tenido las neurociencias en la última década. Muchos estudios realizados demuestran el gran potencial que no está siendo explotado con las estrategias tradicionales donde los datos simplemente se recolectaban y analizaban tras terminar la acción, sin tomar en cuenta toda la información que es capaz de darnos el cerebro y de la cual las personas no son conscientes que nos permiten modular estrategias y experiencias prácticamente a tiempo real.
Por ello cada año hay más y más tendencias relacionadas directamente con el Neuromarketing y el Marketing Sensorial, que marcan el camino que las empresas deberán seguir para no quedarse atrás en el mercado.
El próximo año estas tendencias estarán influenciadas altamente por la tecnología os presentamos 3 de ellas:
Realidad Virtual y realidad aumentada.
A pesar de que ya tienen unos cuantos años en el mercado, el próximo año se espera tome mayor fuerza. Esto porque los avances las han hecho más accesibles para los consumidores y con la introducción del handtracking (el cual permite a los usuarios sumergirse en la experiencia sin la necesidad de de utilizar un mando), aumenta el mundo de posibilidades que esta herramienta puede generar.
Según Matthew Wren, cofundador y director de tecnología de BUNDLAR, “desde la perspectiva del neuromarketing, los datos que produce [La realidad virtual] son una mina de oro de capacidades, tanto para la optimización de la experiencia como para la producción de métricas de uso “.
Mini LED y el 8k
El próximo año las pantallas será mejores, con imágenes más reales y mayor definición. A pesar de que esto es algo que los consumidores generalmente esperan cada año, el 2020 se beneficiará en específico de 2 tecnologías.
La primera serán las mini LED que usan la misma tecnología de las LEDS que conocemos, pero 1000 veces más pequeñas. Su ventaja será que las pantallas podrán ofrecer imágenes con mejor calidad por un precio más económico que otras tecnologías similares.
Además, en el 2020 las pantallas con resolución 8K vendrán con más fuerza, si bien es una tecnología que fue introducida en la segunda mitad de este año, para el próximo se espera tome mayor protagonismo.
La vista es el sentido que las personas primero perciben, por lo cual para los retailers que ofrezcan contenidos en catelería digital esta tecnología será altamente beneficiosa.
IOT (Internet de las cosas)
El Internet de las cosas permite la conexión entre dispositivos, pero su valor real se ve en los datos recolectados por estos.
Según International Data Corporatión para el 2525, más de 41 millones de dispositivos conectados generarán 80 zettabytes de datos (80 mil millones de terabytes).
Esto significa una gran oportunidad para las empresas de usar la integración para optimizar las experiencias en el punto de venta y crear procesos más eficientes que permitan ahorrar recursos y energía, que luego podrán ser invertidos en nuevas y mejores estrategias de marketing que logren un mejor Engagement con los consumidores.
En TSLab, seguimos con nuestro compromiso de estar al día con todas las tendencias, buscando las soluciones más adecuadas para nuestros clientes. Para el próximo año nuestro propósito será la integración de nuestros servicios para poder modular experiencias que impacten a los consumidores de manera positiva.